III MARTES DE PASCUA
SAN MARCOS EVANGELISTA
De igual manera, jóvenes, sed sumisos a los ancianos; revestíos todos de humildad en vuestras mutuas relaciones, pues = Dios resiste a los soberbios y da su gracia a los humildes.
Humillaos, pues, bajo la poderosa mano de Dios para que, llegada la ocasión, os ensalce; confiadle todas vuestras preocupaciones, pues él cuida de vosotros.
Sed sobrios y velad. Vuestro adversario, el Diablo, ronda como león rugiente, buscando a quién devorar.
Resistidle firmes en la fe, sabiendo que vuestros hermanos que están en el mundo soportan los mismos sufrimientos.
El Dios de toda gracia, el que os ha llamado a su eterna gloria en Cristo, después de breves sufrimientos, os restablecerá, afianzará, robustecerá y os consolidará. A él el poder por los siglos de los siglos. Amén.
Por medio de Silvano, a quien tengo por hermano fiel, os he escrito brevemente, exhortándoos y atestiguándoos que esta es la verdadera gracia de Dios; perseverad en ella.
Os saluda la que está en Babilonia, elegida como vosotros, así como mi hijo Marcos.
Saludaos unos a otros con el beso de amor. Paz a todos los que estáis en Cristo.
Propuesta de oración